La Corporación Humanas lleva años trabajado la temática, creando encuestas y cabildos lograron escribir el libro "Cambios constitucionales y derechos humanos de las mujeres". La abogada de la corporación, Camila Maturana, conversó con El Mostrador acerca de las principales demandas que han levantado las mujeres a lo largo de los años. Dentro de ellas destacan el principio de igualdad y no discriminación, el derecho de una vida libre de violencia para mujeres, que se reconozca la diversidad de mujeres, que se garantice los derechos sexuales y reproductivos de la salud y la maternidad voluntaria.
La Corporación Humanas se constituyó el 2004, y fue impulsada por un grupo de mujeres feministas, profesionales y defensoras de derechos humanos, con el fin de generar un espacio de acción, reflexión e incidencia en el desarrollo institucional del país de modo de aportar a la profundización de la democracia y a la inclusión de las mujeres. Por este motivo desde la organización han realizado estudios, encuestas, libros y cabildas para dar a conocer cuáles son los derechos de las mujeres que debería contemplar la nueva Constitución.
“Ese órgano constituyente debe necesariamente asegurar la participación adecuada de la población y eso implica asegurar la paridad en la composición de este órgano. Dado que las mujeres somos la mitad de la población, es un punto fundamental porque consideramos que la única manera de que las demandas de las mujeres por derechos humanos sean reconocidos realmente sin discriminación en la Constitución, pasa por una adecuada representación en el órgano constituyente y una adecuada participación ciudadana durante la discusión constituyente”, señaló Camila Maturana, abogada de la Corporación Humana.
“Consideramos que es crucial que en este órgano constituyente se asegure la representación paritaria de mujeres y hombres, la participación de los pueblos originarios, demandas democráticas mínimas que el movimiento social ha planteado”, agregó.
Desde la corporación crearon un libro llamado “Cambios constitucionales y derechos humanos de las mujeres”, lanzado en 2017, basado en una serie de cabildos, conversatorios, experiencias comparadas de procesos constituyentes y encuestas, lograron sentar las bases de lo que las mujeres quieren en una nueva Constitución. Este libro fue generado en otro contexto país, donde Michelle Bachelet había anunciado un cambio en la Constitución.
Los principios que esperan desde la corporación es que se contemple el principio de igualdad y no discriminación, que dé cuenta de todas las discriminaciones que se sufren en contra de las personas y se garantice el derecho de una vida libre de violencia para mujeres, que se reconozca la diversidad de mujeres, la protección general y también la protección especifica que deben tener las mujeres migrantes, con discapacidad, lesbianas, trans, las niñas, las mujeres en situación de pobreza entre otras, ya que “las mujeres no somos iguales todas, vivimos la discriminación estructural de género de diferentes maneras”, señaló la abogada.
“Aspiramos también a que esta nueva Constitución garantice los derechos sexuales y reproductivos de la salud y la maternidad voluntaria, que permita la inclusión y el desarrollo posterior de carácter legal del conjunto de derechos estos derechos, los cuales son los que permiten a todas las personas sin discriminación, sin violencia, ni coerción, ejercer plenamente la sexualidad como fuente de desarrollo personal y decidir autónomamente sobre la sexualidad y la reproducción, contando con la información, con los medios y los servicios que ellos requieren”, enfatizó Maturana.
En base al nuevo contexto que vive Chile ¿Cuáles son aquellos derechos de las mujeres que debieran estar reconocidos y protegidos en una nueva Constitución?
Aparece como demanda en discusiones en cabildas y encuentros de mujeres, la necesidad y el reconocimiento del carácter productivo del trabajo domestico y de cuidado el reconocimiento de la paridad y la corresponsabilidad es decir la participación de las mujeres en todas las instancias de decisión pública y privada.
La abogada además agregó que aparece la necesidad del reconocimiento de las diversas familias, no solamente la familia tradicional y que también apoyan las demandas de la sociedad civil, como el derecho a la salud, educación de calidad, no sexista, a la seguridad social y pensiones dignas para todos y todas, derechos frente a los recursos naturales y la protección del medio ambiente.
Finalmente expresaron que el reconocimiento de los derechos humanos de las mujeres y de todas las personas, no se contienen en una sola norma o en un solo capitulo sino que debieran ser transversales a lo largo de toda la carta política. Por el momento desde la Corporación Humanas están trabajando en distintas iniciativas, con miras de realizar más cabildos próximamente.