El Municipio de Temuco decidió prohibir que las mujeres se instalen en el centro de la ciudad a vender sus productos. Una guerra que cada cierto tiempo se recrudece y tiene consecuencias directas en las vidas de las personas.
Hace frío y llueve copiosamente, pero Cecilia con su traje típico mapuche lleva a paso firme su carretilla llena de hortalizas por un largo camino de tierra en la comunidad mapuche Pedro Tori.
Son 2 kilómetros los que camina todos los días para tomar un bus que la lleva al centro de Temuco, donde vende sus hortalizas.
Cecilia Panguinao Huelquen tiene 26 años, dos hijas y es una hortalicera mapuche, así como lo fue su abuela y su madre, aunque en mejores condiciones, asegura Cecilia, porque el oficio es muy sacrificado.
Para ella y su familia ha sido la mayor arma para combatir la extrema pobreza que se vive. Según la encuesta Casen 2017, La Araucanía es la región más pobre de Chile.
El proceso de cosecha se lleva a cabo la tarde anterior. Cecilia, acompañada de su hija de 4 años y su madre quién lleva en brazos a la más pequeña de la familia, salen al campo a recolectar los zapallos, cilantro, rabanitos y acelga. Todo orgánico sin pesticidas.
Son decenas las mapuche que se dedican a trabajar la tierra, incluso muchas de ellas son capacitadas por el gobierno.Pero hace algunos años el Municipio de Temuco decidió prohibir que estas mujeres se instalen en el centro de la ciudad a vender sus productos. Una guerra que cada cierto tiempo se recrudece.
El alcalde de Temuco relata que el viernes 14 de junio “se realizó un procedimiento en la calles Montt con Bulnes, donde un grupo de delincuentes se estaba tomando la calle. Hay carabineros agredidos, algunas personas mordidas por estos delincuentes, la verdad es que tiene que terminarse”.
El alcalde llamó a los temuquenses a no comprar en lugares no establecidos.
El presidente de la Corporación de Profesionales Mapuche, Hugo Alcamán, dice que las hortaliceras de Temuco son patrimonio vivo de la humanidad.
El presidente de la cámara de comercio de Temuco aseguró que el comercio informal es competencia desleal ya que no pagan patente.
Dice reconocer la importancia de las hortaliceras en la zona y aseguró que la autoridad está abierta a buscar una solución para las mujeres mapuche que venden sus propios productos.
Cecilia dice que va a seguir luchando por continuar con su oficio. Un legado de su familia, un patrimonio de Chile.