En la comuna de Collipulli, región de La Araucanía, se pretende la instalación de un megaproyecto que atenta contra la calidad de vida de las personas, la degradación de las propiedades del agua, el aire y el suelo. Su construcción se emplazará en terrenos reivindicados por comunidades Mapuche -en las que existe un fuerte histórico denominado “Mariluán”- donde habitan especies silvestres con probabilidad de extinción. Hablamos del “CENTRO DE MANEJO DE RESIDUOS SÓLIDOS MALLECO NORTE”, el que consiste en la construcción y operación de un relleno sanitario para la disposición final de residuos sólidos domiciliarios y asimilables de las comunas de Collipulli, Angol, Renaico y Ercilla, que se ubicará a 7,5 Km de Collipulli, en la ruta 182, camino Collipulli-Angol. Se dispone de un total de 100 hectáreas de propiedad de la Asociación de Municipalidades de Malleco Norte, en las que se intervendrán 42,52 hectáreas en primera instancia. Su construcción está a cargo del Consorcio Consemar & Williams Ives S.A, representado por William Ives Galleguillos.
El proyecto distingue tres zonas principales de construcción, correspondientes a: zona de concentración de residuos, zona de manejo, tratamiento de lixiviados, zona de instalaciones administrativas y operacionales. Durante la fase de operación se prevé recibir aproximadamente 2.942.306 toneladas de residuos durante los 20 años de vida útil estimados. En cuanto a la recepción de basura, el Consorcio Consemar & Williams Ives S.A recibirá 300 ton/diarias, ascendiendo gradualmente a 500 ton/diarias de residuos pertenecientes a las comunas que integran la AMMN (Asociación de Municipalidades de Malleco Norte) y otras comunas que dispongan de recursos para pagar por el depósito de basura.
Se contempla la instalación de una planta de tratamiento de líquidos de lixiviados (líquidos generados por la basura) que recién operará 8 años después de comenzados los trabajos en la fase de operación, diseñada para un caudal máximo de efluente de 50 m3/día. Durante este tiempo, es posible que existan rupturas de la arcilla, material plástico que sostendrá y mantendrá los líquidos, pudiendo filtrarse al suelo, contaminando napas subterráneas y el estero Pichilolenco, afluente próximo al vertedero que alimenta otras fuentes hídricas utilizadas para regadío de hortalizas en el sector Santa Elena, comuna de Angol.
A raíz de esta problemática es que nace el movimiento “No al relleno sanitario en Collipulli” que se opone a la instalación del relleno sanitario que afectaría la forma de vida y cotidianidad de los habitantes de la comuna. Los estudios de impacto ambiental señalan que el daño más significativo del proyecto será la alteración de propiedades físicas del suelo. Este proyecto tuvo una escasa consulta ciudadana, no logrando recoger la opinión de los/as vecinos/as de Collipulli y nula consulta indígena, pasando a llevar los derechos de las comunidades.
Es por lo anterior que Collipulli dice ¡NO AL RELLENO SANITARIO EN COLLIPULLI!