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Murió Agustín Edwards, el impune golpista y sedicioso dueño de El Mercurio.


Este lunes murió a los 89 años el periodista y dueño del diario El Mercurio, Agustín Edwards Eastman. La información fue confirmada por el diario La Tercera.


La precaria situación de salud que Edwards arrastraba hace ya meses se había complicado en marzo pasado luego de que se le agravara una infección al oído. Su fallecimiento, de acuerdo a lo que consigna Radio Bío Bío, se produce luego de un período de dos meses en coma inducido.


Golpista y encubridor

Cabe recordar que Edwards está dentro de los personajes influyentes de nuestro país que colaboraron para el derrocamiento por las armas el 11 de septiembre de 1973 del presidente electo democráticamente, Salvador Allende. En la práctica, su empresa, El Mercurio, recibió financiamiento de la Agencia de Inteligencia Central -la CIA, por sus siglas en inglés- para desestabilizar al gobierno del mandatario socialista.


El 14 de septiembre de 1970, diez días después de la elección de Allende, el entonces presidente norteamericano Richard Nixon recibió en la Casa Blanca a Agustín Edwards, quien demandó el apoyo de Estados Unidos en favor de un derrocamiento del mandatario de la UP. Es a partir de este encuentro que Nixon le da instrucciones al Director de la CIA, Richard Helms, para que un golpe de Estado se concrete en Chile.


No tranquilo con eso, al otro día Edwards se reúne con el secretario de Estado, Henry Kissinger, y otras autoridades norteamericanas con el mismo objetivo.


Una vez concretado el golpe de Estado, a través de El Mercurio y La Segunda Edwards se transformó en uno de los principales brazos comunicacionales de la dictadura, encubriendo las violaciones a los derechos humanos y difundiendo información falsa con el objetivo de proteger a los aparatos de seguridad y a la brutal represión del régimen.


Si bien el magnate nunca ha sido juzgado en Chile por su complicidad con los crímenes ocurridos a partir de 1973, en septiembre de 2013 debió declarar como testigo en la causa que se abrió por la llamada Operación Colombo. Específicamente, el periodista fue consultado por el tristemente célebre titular del 25 de julio de 1975, aparecido en La Segunda, en donde se podía leer: “Exterminados como ratones”. De esa forma se “informaba” sobre la muerte de 119 opositores a la dictadura.


La maniobra mediática formó parte de una operación delictual internacional en la que participaron también medios de comunicación de Argentina y Brasil. A través ésta se difundió informaciones falsas para encubrir el asesinato del masivo grupo de opositores, compuesto especialmente por militantes del MIR.


Esta es una de las principales razones por las que en mayo de 2015 el Colegio de Periodistas de Chile decidió expulsar a Agustín Edwards de la entidad.


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